Venas varicosas: un aumento en el diámetro de las venas de las extremidades inferiores, causado por la disfunción de sus válvulas y el flujo sanguíneo deficiente. Las venas varicosas pueden afectar no solo las venas de las piernas, sino también los vasos del plexo hemorroidal, los testículos (varicocele) e incluso el esófago. Sin embargo, las venas varicosas de las extremidades inferiores son las más comunes. Cuando aparecen los primeros signos de la enfermedad, es necesario consultar a un flebólogo.
Causas de las venas varicosas
Las causas de las venas varicosas son:
- Herencia: la tendencia a las venas varicosas está determinada genéticamente y generalmente ocurre en parientes cercanos.
- Embarazo y parto. Durante la gestación, aumenta la carga en las extremidades inferiores y también aumenta el volumen de sangre circulante, lo que crea una carga adicional en la red venosa.
- De pie prolongado. Las varices se consideran una enfermedad profesional de vendedores, peluqueros y otros profesionales que tienen que estar de pie durante mucho tiempo.
El género se considera un factor de riesgo para las venas varicosas, y las mujeres tienen más probabilidades de desarrollar esta afección que los hombres. Esto se atribuye al hecho de que en el cuerpo femenino, los tejidos conectivos que forman, entre otras cosas, las paredes de los vasos sanguíneos y las válvulas venosas, son más elásticos, lo que significa que pueden soportar menos estrés.
¿Qué sucede con las venas con varices?
La causa principal de las venas varicosas es un mal funcionamiento de las válvulas venosas. A diferencia de una arteria, una vena no tiene una pared muscular que le permita contraerse. Por tanto, el retorno de la sangre al corazón desde las extremidades inferiores se lleva a cabo debido a las contracciones musculares durante la marcha. El reflujo de sangre se evita mediante válvulas venosas delgadas. Si las válvulas no hacen su trabajo, la sangre no puede regresar al corazón y se estanca en las venas, lo que hace que se expandan y que los tejidos circundantes se hinchen.
El edema se acompaña de una reacción inflamatoria que se extiende por todas las venas de las extremidades inferiores. Las válvulas que están sujetas a estrés frecuente se inflaman más rápido. La inflamación provoca daño a las paredes de las venas y trombosis.
Convulsiones y otros síntomas
El principal síntoma de las varices es el aumento del diámetro de las venas superficiales y la aparición de arañas vasculares en la piel. Hay síntomas que pueden indicar venas varicosas incluso antes de que aparezcan venas varicosas visibles:
- pesadez en las pantorrillas que se produce tras una larga permanencia sobre las piernas;
- sensación de ardor en las piernas;
- convulsiones, que ocurren con mayor frecuencia por la noche;
- hinchazón que aparece por la noche y desaparece por la mañana;
- dolor que se extiende a lo largo de la vena.
La enfermedad se desarrolla en varias etapas.
- Etapa inicial. Los pacientes solo se quejan de una sensación de pesadez en las piernas: en esta etapa, los médicos llaman a las venas varicosas "síndrome de piernas pesadas". No hay venas dilatadas visibles, sin embargo, pueden verse pequeños "asteriscos" vasculares en la piel. Las piernas se hinchan solo por la noche. Con una visita oportuna al médico, el especialista podrá elegir un medicamento que pueda prevenir un mayor desarrollo de la enfermedad.
- etapa de subcompensación. Las convulsiones se unen a los síntomas enumerados anteriormente. Las venas expandidas con nódulos se vuelven notables.
- etapa de descompensación. Se altera el flujo venoso de las extremidades inferiores. La hinchazón se vuelve permanente. La piel se pigmenta, aparecen úlceras tróficas. Un aumento en el volumen del edema indica el desarrollo de la enfermedad. Con la aparición de insuficiencia venosa crónica, la pierna puede hincharse desde la rodilla hasta la articulación del tobillo. La piel al mismo tiempo se vuelve cianótica, es decir, azulada, debido al estancamiento de la sangre venosa. Si no se trata, la enfermedad puede dar una complicación tan peligrosa como las úlceras tróficas que se producen debido a un suministro insuficiente de sangre a los tejidos periféricos con oxígeno y nutrientes.
El principal peligro para los pacientes diagnosticados con venas varicosas es la tromboflebitis, es decir, la inflamación de las paredes de los vasos sanguíneos. Como resultado, se forman coágulos de sangre que pueden desprenderse y entrar en el ventrículo derecho con el torrente sanguíneo y luego en las arterias pulmonares. Esto puede conducir a una embolia pulmonar, una complicación peligrosa que causa insuficiencia respiratoria aguda y puede ser fatal.
Diagnóstico de la enfermedad
Los flebólogos están involucrados en el diagnóstico de las venas varicosas. Ya se puede hacer un diagnóstico en la etapa de recopilar una anamnesis y examinar al paciente. Además, se utiliza la ecografía de los vasos sanguíneos, que permite determinar el grado de permeabilidad de las venas y evaluar el estado de sus válvulas.
Si se ven afectadas las venas profundas, se puede prescribir un examen de rayos X, durante el cual los vasos se tiñen con agentes de contraste: flebogammagrafía y flebografía.
Para someterse a los diagnósticos necesarios, debe programar una cita con un flebólogo. Pero antes de eso, puede consultar a un médico por teléfono. El médico le indicará a qué exámenes específicos debe someterse y cómo prepararse para ellos.
¿Qué medicamentos se pueden recetar?
El tratamiento conservador se utiliza en las etapas iniciales de la enfermedad y como complemento de la cirugía.
Los siguientes medicamentos se usan para tratar las venas varicosas:
- Los venotónicos son fármacos que aumentan el tono de las venas y mejoran la salida de sangre venosa de las extremidades inferiores.
- Angioprotectores que protegen los vasos sanguíneos del daño y previenen el desarrollo de inflamación de la pared venosa.
- Cremas y ungüentos que contienen heparina. La heparina ayuda a reducir la viscosidad de la sangre y ayuda a prevenir los coágulos de sangre.
- Anticoagulantes. Estos medicamentos se prescriben si el paciente tiene una mayor tendencia a la trombosis.
- Vitaminas que fortalecen los vasos sanguíneos y mejoran las propiedades reológicas de la sangre. Se muestran especialmente los complejos multivitamínicos, que incluyen vitaminas A, C y K.
Es importante comenzar la terapia en la etapa inicial del desarrollo de las venas varicosas: si la vena se ha expandido demasiado, no será posible prescindir de la intervención quirúrgica.
Las venas varicosas son una enfermedad que no solo reduce la calidad de vida, sino que también está plagada de complicaciones graves, la más peligrosa de las cuales es la embolia pulmonar. Ante los primeros síntomas de venas varicosas, debe consultar a un médico que pueda elegir el tratamiento adecuado y detener el desarrollo de la patología.